A seis patitos un día conocí,
gordos, flacos y rubios vi,
pero había un patito muy especial
guiaba a todos con su cuac, cuac, cuac.
(Niños: cuac, cuac, cuac)
Guiaba a todos con su cuac, cuac, cuac.
Se fueron al río a pasear,
pues a los patos les gusta nadar
y ese patito tan especial
guiaba a todos con su cuac, cuac, cuac.
(Niños: cuac, cuac, cuac)
Guiaba a todos con su cuac, cuac, cuac.
Después regresaron a su hogar
a comer un guiso que les hizo mamá
y ese patito tan especial
guiaba a todos con su cuac, cuac, cuac.
(Niños: cuac, cuac, cuac)
Guiaba a todos con su cuac, cuac, cuac.
Pídales que se organicen en equipos con la misma cantidad de patos que menciona la canción (6).
Guíe la atención de los niños en la parte de la canción que dice que hay patos, gordos, flacos y rubios (lo que quiere decir que hay diferencias entre unos y otros). Pregunte si entre los niños y niñas también hay diferencias.
Cada vez que se termine de cantar, pida a un grupo de seis patitos que se describan físicamente. Si algún niño necesita un poco de ayuda, puede preguntar, por ejemplo, "¿este patito es gordo o flaco?".
Si se desea evitar el estereotipo de que la mujer es la que hace la comida, como menciona la canción (refiriéndose a una patita, por supuesto), se puede modificar, de manera intercalada, la letra, para que diga: a comer un guiso que les hizo papá.
El día sábado podrán encontrar ya la música de esta canción para que la utilicen en su trabajo docente.
0 comentarios:
Publicar un comentario